Los chinos, en su salsa

En el año 2000 el "Colectivo de los Ocho Inmortales" en Barcelona fundó el "Observatorio del Racismo y la Xenofobia contra las Personas de Origen Chino en España" (ORXPOCE). El Observatorio estuvo asociado al Instituto de Estudios Internacionales e Interculturales (IEII) de la Universitat Autónoma de Barcelona (UAB) y pasó a formar parte del Observatorio Europeo del Racismo y la Xenofobia-European Monitoring Centre on Racism and Xenophobia (EUMC). Incluso se elaboró un informe donde se recopliban una serie de ejemplos de noticias publicadas en periódicos que afectaban a la dignidad de personas chinas y se envió al Defensor del Pueblo quien nos respondió invitándonos iniciar una vía procesal mediante los Tribunales de Justicia.

Ahora, más de una década después del comienzo de aquella iniciativa que quedó temporalmente en letargo, y constatando que poco ha cambiado en la sociedad y en el medio que nos rodea en este sentido, el Grupo de Investigación InterAsia, dentro de su nuevo proyecto de investigación I + D sobre el impacto de Asia Oriental en el contexto español, retoma el compromiso de estar alerta y sacar a la luz aquellas noticias, comportamientos y acciones que atenten contra la dignidad de las personas de origen chino en España, en la medida en que fomentan el racismo y la xenofobia, los cuales lejos de favorecer la cohesión social lo que hacen es promover, provocar y legitimar conflictos amparados en supuestas diferencias culturales, a menudo más imaginadas (con profundas raíces orientalistas) que reales.

Esta renovada voluntad de compromiso ya se ha materializado en una primera acción:



El domingo 18 de diciembre de 2011, El País publica, en su edición de Madrid, un artículo bajo el sugestivo nombre de "Los chinos, en su salsa". El tema del artículo, los chinos de Madrid, nos atrae desde el primer momento. Sin embargo, la lectura no nos deja indiferentes... Por lo que decidimos enviar la siguiente carta al Defensor del Lector de El País.
"Periodismo de rebajas y la amenaza xenófoba"
Domingo por la mañana. Abrimos El País y encontramos un artículo sobre los chinos que viven en Madrid, “Los chinos, en su salsa”. No hace falta leer mucho para ver por dónde van los tiros...

La falta de respeto que muestra el artículo no sólo pasa por las faltas de ortografía fácilmente subsanables, pues cuando un periodista se enfrenta a lenguas desconocidas debería de comprobar antes de poner negro sobre blanco la forma correcta (Zhe Jian por Zhejiang, Chitanés por Qingtianés), sino que el desprecio hacia nuestros vecinos de origen chino se acentúa con expresiones como "trocito diminuto pegado al azul clarito..." (¿son menores, los ridiculizamos?), o la ignorancia de "cerca de Cantón" (si 1.500 kilómetros es cercanía, pues vale), por no hablar de la insistencia en los muertos que a estas alturas sólo indica mofa.

Está claro que las ideas preconcebidas y los estereotipos han primado más que la vocación y el trabajo serio para comunicar realidades de manera respetuosa y veraz. Parece que dos décadas de investigación académica sobre la migración china en España no han servido de nada, porque se siguen usando los mismos estereotipos de siempre y además con muchos errores que nunca hubiera cometido alguien que escuche con atención y respeto a las personas que entrevista para escribir una crónica. Los tópicos están servidos, como dice el autor, “en su salsa”. Las afirmaciones tácitas sobre el conocimiento de los idiomas son totalmente falsas (“Ahora los niños saben mandarín. TODOS. Lo que no saben tan bien algunos es español”); se da continuidad a la exotización a través de las costumbres gastronómicas (“comidas tradicionales cantonesas”, recordemos que Cantón queda muy lejos del distrito de Qingtian, en la provincia de Zhejiang); y se presenta una equívoca y superficial descripción del “horario de los chinos” que no lleva a ninguna parte. Se habla de una sanidad “muchísimo más barata” en China que en España, olvidando que en España la sanidad es gratuita para todos los ciudadanos empadronados en alguna ciudad española, independientemente de su situación jurídica. La falta de matices no hace más que perpetuar una imagen sesgada de la comunidad china. 
¿Está de rebajas el periodismo? ¿Te pagan por escribir lo primero que se te pasa por la cabeza? ¿No hay tiempo ni recursos para corregir? ¿Hay que fomentar y vender xenofobia? ¿Hay que minorizar a las personas de origen inmigrante? ¿Serán algún día mayores? Con artículos de este tipo se fomenta la ignorancia y se da alas a la xenofobia. 
Firmado: 
Observatorio de la Xenofobia y el Racismo hacia las Personas de Origen Chino en España (OXRPOCE), Universidad Autónoma de Barcelona


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